domingo, 13 de octubre de 2019

Warhammer Underworlds: Beastgrave

Título: Warhammer Underworlds: Beastgrave
Año: 2019
Autor: David Sanders
Diseño gráfico: N/D
Duración aprox.: 30-60 min.
Jugadores: 2
Dificultad: 2/5
Dependencia del idioma: Traducido al castellano por Games Workshop.

Por tercer año consecutivo desde su lanzamiento, y tal como viene siendo habitual con esta línea de juegos Games Workshop, aparece un nueva “temporada” para Warhammer Underworlds, que en esta ocasión lleva por título Beastgrave. No hay grandes cambios, aparte de los meramente estéticos, entre este título y sus precedentes (reseñados aquí y aquí). De nuevo tenemos una “caja básica” con todo lo necesario para jugar a este sencillo juego de enfrentamientos entre pequeñas bandas de alrededor de media docena de figuras: tableros, mazos, dados, miniaturas, contadores, etc… La diferencia esta vez se limita a la ambientación: de la ciudad espejada de Shadespire nos trasladamos ahora a las profundidades de Beastgrave, una enorme montaña repleta de túneles y cavernas en donde combatirán razas como los Rapaces de Grashrak o la Cacería Salvaje de Skaeth, hombres bestia y elfos semianimales, respectivamente, que habitan por estos entornos, como se ve, más relacionados con la naturaleza que los de las cajas anteriores, en los que predominaban las ruinas y los edificios.

Una nueva localización en la que luchar: la montaña Beastgrave, y dos nuevas bandas

Me remito otra vez a lo ya comentado sobre el juego en mis anteriores reseñas: que sus partidas me resultan algo cortas (aunque entiendo que esa es precisamente la premisa de la serie), y que lo que más me cautiva son sus exquisitas miniaturas; quizá incluso demasiado exquisitas, pues los componentes de algunas de ellas son excesivamente delicados y no parecen los más ideales para un juego de este tipo, en el que hay que estar manoseando bastante las figuras.

Exquisitas aunque algo delicadas miniaturas con las que jugar

Estéticamente, he de decir que Beastgrave es la temporada que menos me ha gustado de las tres, pero eso, por supuesto, es una cuestión personal: predominan los tonos oscuros, eminentemente marrones, en sus mapas, y las bandas ofrecidas esta vez no me resultan tan atractivas como las de las otras cajas. También encuentro algo negativo que, como en toda serie de juegos que comienza a tener expansiones, parece que es inevitable que aparezcan incompatibilidades entre ellas (por lo visto, algunos mazos no son compatibles), lo que para mí es un punto en contra del juego y de su fabricante. Por el contrario, el aspecto más positivo de Beastgrave lo encuentro en la nueva edición de las reglas se nos ofrece, más claras y pulidas tras tres revisiones.

Los nuevos personajes de Beastgrave

No hay comentarios:

Publicar un comentario